Khao Niao Mamuang, este arroz con leche de coco y mango es un famoso postre de la cocina tailandesa. Su traducción literal es arroz pegajoso con mango. Este postre se realiza con arroz glutinoso.
Se suele servir con aderezos opcionales, en nuestro caso con arroz verde suflado y grosellas.
Una curiosidad es que en Tailandia lo conocen también como Mango Sticky Rice.

Dejar el arroz glutinoso en remojo toda la noche y escurrir.
Pasar a un papel sulfurizado humedecido y pinchado. Envolver en el papel y colocar envuelto en una vaporera.
Cubrir la vaporera con una tapa y cocinar a fuego medio durante unos 30 minutos. (vigilar que no se quede sin agua).
Poner en una olla la leche de coco, el azúcar y la sal. Mezclar. Remover bien y dejar que hierva a fuego lento hasta que ligue.
Incorporar a la olla, el arroz glutinoso cocido con la leche de coco azucarada caliente. Mezclar bien y tapar durante 15 minutos.
Colocar un poco de arroz en un tazón pequeño y presionar el arroz con el dorso de la cuchara.
Mezclar la leche de coco, el azúcar moreno, la maicena y la sal. Remover bien hasta que la maicena se disuelva.
Cocinar a fuego lento, seguir removiendo constantemente hasta que espese.
Poner la crema resultante en un cuenco.
Freír una taza de arroz verde en aceite de girasol. Veréis que sufla muy rápido.
Apartar con una espumadera y poner sobre papel absorbente.
Servir el arroz moldeado en un plato y acompañado de medio mango cortado. Colocar un poco de crema de coco encima del arroz.
Decorar con hierbabuena, grosellas y el arroz verde suflado.
Ingredientes
Instrucciones
Dejar el arroz glutinoso en remojo toda la noche y escurrir.
Pasar a un papel sulfurizado humedecido y pinchado. Envolver en el papel y colocar envuelto en una vaporera.
Cubrir la vaporera con una tapa y cocinar a fuego medio durante unos 30 minutos. (vigilar que no se quede sin agua).
Poner en una olla la leche de coco, el azúcar y la sal. Mezclar. Remover bien y dejar que hierva a fuego lento hasta que ligue.
Incorporar a la olla, el arroz glutinoso cocido con la leche de coco azucarada caliente. Mezclar bien y tapar durante 15 minutos.
Colocar un poco de arroz en un tazón pequeño y presionar el arroz con el dorso de la cuchara.
Mezclar la leche de coco, el azúcar moreno, la maicena y la sal. Remover bien hasta que la maicena se disuelva.
Cocinar a fuego lento, seguir removiendo constantemente hasta que espese.
Poner la crema resultante en un cuenco.
Freír una taza de arroz verde en aceite de girasol. Veréis que sufla muy rápido.
Apartar con una espumadera y poner sobre papel absorbente.
Servir el arroz moldeado en un plato y acompañado de medio mango cortado. Colocar un poco de crema de coco encima del arroz.
Decorar con hierbabuena, grosellas y el arroz verde suflado.