Estas bolas o albóndigas de pato asado, con algunos ingredientes característicos del pato laqueado, no nos dejarán indiferentes. Su increíble sabor oriental nos trasladará a la comida callejera de esa ciudad china.
Quitar la piel al pato asado y guardar para otra elaboración.
En una trituradora poner un diente de ajo en láminas, unos trocitos de jengibre fresco y media cebolla tierna en trocitos. Añadir el pato asado en trozos y triturar.
Incorporar el huevo, un chorrito de salsa hoisin, otro de salsa de soja, otro de aceite de sésamo y una tacita de panko. Volver a triturar.
Hacer las bolas o albóndigas y sofreír en un wok con un poco de aceite de oliva suave.
Una vez sofritas, añadirles el caldo de pollo, un chorrito de salsa hoisin y un chorrito de salsa de soja. Rallar un diente de ajo y un poco de jengibre.
Incorporar un poco de aceite de sésamo, una cucharada de miel, el sésamo tostado y el negro y un poco de cilantro fresco recién cortado. Dejar que hierva unos minutos para que se integren bien todos los sabores y se reduzca el caldo.
Servir en un bol con una base de arroz blanco.
Cubrir con la salsa y decorar el plato con la parte verde de la cebolleta.
Ingredientes
Instrucciones
Quitar la piel al pato asado y guardar para otra elaboración.
En una trituradora poner un diente de ajo en láminas, unos trocitos de jengibre fresco y media cebolla tierna en trocitos. Añadir el pato asado en trozos y triturar.
Incorporar el huevo, un chorrito de salsa hoisin, otro de salsa de soja, otro de aceite de sésamo y una tacita de panko. Volver a triturar.
Hacer las bolas o albóndigas y sofreír en un wok con un poco de aceite de oliva suave.
Una vez sofritas, añadirles el caldo de pollo, un chorrito de salsa hoisin y un chorrito de salsa de soja. Rallar un diente de ajo y un poco de jengibre.
Incorporar un poco de aceite de sésamo, una cucharada de miel, el sésamo tostado y el negro y un poco de cilantro fresco recién cortado. Dejar que hierva unos minutos para que se integren bien todos los sabores y se reduzca el caldo.
Servir en un bol con una base de arroz blanco.
Cubrir con la salsa y decorar el plato con la parte verde de la cebolleta.